El Camino del guerrero

El camino del guerrero maldito y lleno de gloria a la vez
y aunque no seamos pocos quienes lo hemos transitado
siempre al final sin importar quien, todos terminaremos igual
cuando la muerte nos sonría y nos llame por nuestro nombre
pero hasta que ese día llegue seguiremos haciendo lo que sabemos.

¡¡HAREMOS LA GUERRA!!

Pues somos guerreros, eso somos y nada más...


Algunos guerrearemos por el dolor de haber perdido lo mas preciado
mientras que otros lo haremos para proteger al ser amado
muchos pelearemos para defender nuestro hogar
y muchos mas combatiremos por ambición y poder.

Pero la triste verdad es que la mayoría combatiremos
por que la guerra es lo único que conocemos
algunos nos llaman héroes y no están equivocados
otros nos maldicen y nos llaman demonios, y tampoco están errados.

Puesto que todos aquellos que se hacen llamar guerreros
son héroes y demonios a la vez...
nosotros desconocemos el honor que impulsa al caballero
ya que matamos sin contemplación y sin dudar
y de la misma manera morimos sin esperar misericordia de nadie.

Unos pocos seremos inmortalizados entre los hombres
y demasiados seremos olvidados, sin nadie dispuesto a recordarnos
hemos logrado grandes hazañas que nadie jamas contemplo
y hemos observado el rostro de la muerte tantas veces
que nos hemos acostumbrado a su calaverica y burlona sonrisa.

Algunos rescatamos de crueles tiranos a mujeres que jamas conocimos
con la esperanza de encontrar un poco de ese alivio llamado amor
pero siempre, cuando creemos haberlo hallado, nunca resulta ser verdadero
ya que ninguna mujer que no sea como nosotros podría amarnos.

Podríamos formar alianzas con otros guerreros, pero nunca serian duraderas
pues nuestra naturaleza es solitaria...
podemos estar al servicio de algún señor, e inclusive dar la vida por el
pero sabemos que en casi todos los casos, sobreviviremos a ellos.

Soy un guerrero, como muchos en la historia y como pocos en este mundo
y estas son mis ultimas palabras, pues se que mi hora se acerca
el dulce llamado de la tumba pronuncia mi nombre con fuerza
y en mi ya no quedan fuerzas para resistir.

La muerte me sonríe por ultima vez... pero esta vez pienso devolverle la sonrisa.